Hace algunos días el gobernador del Estado de Nuevo León, Samuel García, se encargó de entregar en el H. Congreso del Estado de Nuevo León, la papelería para una posible nueva construcción del famoso estadio de Tigres.
Con el paso de los días se creía que esto podría tener una respuesta positiva, pero fue de inmediato el cómo se supo que había detalles equivocados en dicha papelería, misma que de manera oficial, hoy se confirmó que la documentación va para atrás y que el proyecto no es posible.
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Se estableció que habrá puntos que aclarar para luego retomar en la discusión, sin embargo, hoy por hoy, las observaciones de los documentos, presentados hace más de una semana, impiden que el procedimiento pueda continuar.
La Comisión de Desarrollo Urbano fue la encargada de poner freno una vez más y hacer que el proyecto que se presentó hace poco más de un año, pareciera que será uno más a la lista de estadios imaginarios.
¿La afición de Tigres quiere nuevo estadio?
En las redes sociales se leen comentarios de que la afición de los Tigres prefiere una remodelación del Estadio Universitario, en vez de uno totalmente nuevo, y es que saben que las cosas podrían cambiar, como el ambiente y los costos, aparte de que el Volcán ya es toda una tradición.
Los estadios imaginarios de Tigres comienzan a cansar a la afición, pues consideran que realmente no es algo urgente o necesario, sobre todo por la situación actual que vive el Estado, siendo que habría más prioridades para los ciudadanos en general.
¿Nuevo Estadio imaginario de Tigres?
Hace un año hubo un evento en el Estadio Universitario en donde se presentó el proyecto en conjunto con la directiva del club, gobierno y la empresa encargada de administrar el mismo.
Al evento asistieron medios, personalidades, autoridades y futbolistas, por lo que se creía que dicho proyecto iba con toda la seriedad, sin embargo, parece ser que una vez más todo terminará en una fantasía.
Se espera que en algún momento sí se pueda hacer un nuevo estadio, pero todo indica que será en algunos años más, cuando las condiciones puedan ser favorables para todas las partes.
Un plazo de cinco años es lo que el gobierno pide para la construcción del estadio, por ahora el proyecto se podría decir que estará en pausa en lo que se revisan ciertos detalles, pues se necesita más información a detalle para proceder.
Se espera que el nuevo Estadio de Tigres tenga capacidad para más de 60 mil espectadores y que sin duda será el mejor de todo Latinoamérica, el principal freno ha sido la falta de claridad del proyecto en el tema de las inversiones y los terrenos.