El futbol en Argentina tiende a dejarnos unas joyitas en la cancha, pero también ciertos momentos donde termina siendo igual de surreal que las ligas en todo Latinoamérica. En el trofeo de campeones entre Racing de Avellaneda y Boca Juniors, el partido terminó por una razón que nunca volverá a pasar.
La academia quedó campeón
El partido terminó 2-1 a favor de Racing. Las anotaciones fueron por parte de Matías Rojas y Carlos Jonás Alcaraz. Por parte del Xeneize, Norberto Briasco puso la anotación bostera.
El juego se fue hasta los tiempos extras, pero terminó con la suspensión del mismo después de que Boca Juniors se quedó sin jugadores en la cancha. El árbitro expulsó a tantos jugadores del Xeneize que tuvo que acabar antes el encuentro.
Feria de expulsados en Argentina
Boca terminó con cinco expulsados, y por reglamento, el juego ya no pudo continuar. Todo lo ocasionó el segundo gol de Racing, Alcaráz anotó al 118 y se lo festejó a toda ‘La 12’, ahí se les fueron todos encima y el árbitro comenzó con la fiesta de expulsiones. Primero echó al autor de la anotación y luego echó a Advíncula, Zambrano, González, Fabra y Benedetto. Cabe decir que para este momento, el Xeneize ya jugaba con nueve.
Cuanto terminó el partido, el árbitro echó a 10 jugadores en total, siete de Boca, incluyendo a algunos que había en la banca, y tres de Racing, incluido el que le dio el gol de la victoria a la Academia.
La pasión a veces es excedida en el futbol argentino, los jugadores sienten tanto los colores del equipo que defienden que terminan en conatos de bronca, discusiones interminables, y como en el partido de hoy, con una lluvia irreal de expulsados.
Este partido terminará como una gran anécdota para todas las hinchadas rivales, el juego no se terminó y las barras enemigas les cantarán que abandonaron, una vez más.