Checo Pérez completó una histórica temporada 2023 de Fórmula 1 al obtener el subcampeonato, la mejor posición para un mexicano. Sin embargo, llegar hasta ese punto no le fue sencillo y admitió que eventualmente las carreras dejaron de serle divertidas.

En entrevista con Motorsport, el tapatío confesó que la presión dentro de Red Bull llegó a ser tan abrumadora, que los fines de semana dejaron de generarle felicidad.

“Estaba teniendo algunos fines de semana que eran tan difíciles que no eran divertidos. Estoy aquí porque sigo amando lo que hago y porque sigo divirtiéndome y disfrutando. Y ese era mi principal objetivo, que realmente necesitamos que las cosas cambien. Pasé momentos muy difíciles en pocos meses, digámoslo así“, expresó Checo Pérez.

Uno de sus momentos más críticos fue el GP de Qatar, que cataloga como el peor fin de semana de toda su trayectoria en la F1.

Tras esa prueba, Pérez trabajó arduamente en la fábrica de Red Bull y en simulador para recobrar su nivel mental y afrontar con optimismo la recta final del campeonato, cosa que logró al asegurar el subcampeonato.

Pese a los malos momentos, Checo Pérez aclaró que el retiro nunca fue una opción: “No soy de los que se rinde. No es algo que contemplé”, dijo.

Con 32 años, Checo demostró capacidad para sobreponerse incluso en la adversidad extrema de la F1. Ahora buscará iniciar el 2024 con el impulso de la histórica segunda posición del año pasado.