Por: Ivan Pérez, Carlos Herrera y Eduardo Hernández
Adrián Martínez dijo en una sala enorme del WTC de la ciudad de México, el 12 de julio de 2012, que era aficionado de Correcaminos. Estaba vestido con la camiseta del equipo y se aprestaba a dar un discurso ante futbolistas profesionales, directivos, dueños, periodistas y otros como él, fans. Se acercó al estrado, acomodó a su altura el micrófono y empezó a hablar.
“Nunca imaginé estar en un evento de esta índole (…), les propongo un trato, así como nosotros nos entregamos, ustedes háganlo de la misma manera, corran como nunca (…), queremos un deporte en todo su esplendor” y después de esas palabras, el enorme auditorio le aplaudió estrepitosamente.
Aquel día se presentó el concepto de la Liga MX, con logo, himno y compromisos, como el código de ética, y también se incluyó a los aficionados en el acto, porque eran parte del futbol y les querían dar su lugar. De eso ya han pasado más de dos años y el balance de quienes miran por televisión o compran boletos para acudir a los estadios mexicanos no es bueno, al campeonato mexicano lo definen entre “regular” y “pésimo” y si por ellos fuera, prefieren ver un encuentro de otro país y, de paso, la mayoría dice que lo que pagan por ir al estadio “no” corresponde al espectáculo que ven, lo consideran de menor calidad.
El diario El Economista presentó el “Primer Informe de Calidad de la Liga MX”, dándole voz a los aficionados, a los que compran la camiseta de su equipo favorito, a los que gastan por ir a un estadio de futbol y dejan más de 2,000 millones de pesos en taquilla al año en un campeonato que genera 2,700 millones de pesos en derechos de televisión, de acuerdo con la consultora deportiva MX Sports. Pero de acuerdo con estas encuestas realizadas entre aficionados de 10 estados de la República, su calificación no es positiva.
Seis de cada 10 fans considera que el nivel deportivo y calidad de nuestro torneo es “regular”. Si sumamos la cifra entre los que consideran que la liga es “regular” y “pésima”, el porcentaje entre ambos es de 73.3 por ciento. Además, ninguno de los encuestados consideró que tenemos un campeonato “excelente” y 26.7% lo definió como “bueno”.
El 3 de enero de este año, Decio de María, presidente de la Liga MX, explicó a la cadena Fox Sports: “No tenemos nada en común con el futbol europeo, debe ser como Brasil o Argentina, no como Europa”, dijo.
En contraparte, los aficionados mexicanos no sólo miran futbol local; ahora por los sistemas de paga, como SKY, ESPN, el mismo Fox, Claro Sports, Televisa o TV Azteca, se pueden observar encuentros de la liga española, inglesa, portuguesa, alemana, italiana, holandesa, brasileña, francesa, la Liga de Campeones de Europa, la Europa League, torneos de naciones… y es inevitable la comparación.
Al cuestionarle a los aficionados mexicanos si prefieren ver un partido de la Liga MX (ya sea en TV o ir al estadio) o de otro campeonato extranjero, la respuesta es que 69% de ellos opta por un torneo foráneo (Liga BBVA, Premier League, Bundesliga y Champions son los favoritos). Apenas 25.8% decide que su tiempo lo gastará en un duelo de nuestro balompié.
Precisamente este año, en julio, después de aquella presentación del 2012, la consultora brasileña Pluri daba a conocer que la Liga MX era la quinta que llevaba más aficionados en promedio a sus estadios, superando a campeonatos como Francia, Argentina, Holanda o Estados Unidos.
El ranking ubicaba que el torneo mexicano convoca casi 23,000 espectadores a sus estadios por partido, más que los 18,000 de la MLS de Estados Unidos, ¿eso quiere decir que hay más inmuebles llenos en la Liga MX?, no. Respecto del porcentaje de ocupación, la situación es así: de cada 10 asientos disponibles en los colosos nacionales, se ocupan 5.3, mientras en los del vecino del norte, 8.5.
Pese a ello, los fans mexicanos consideran en 67.9% que lo que pagan por ir a los estadios (anualmente se dejan en taquilla más de 2,000 millones de pesos) no es proporcional a lo que miran en la cancha, consideran que su inversión es mucho más de lo que se ofrece en la cancha; 31.2% dijo que era proporcional y justo.
El reporte es un ejercicio ejercido por este diario dando voz a los que miran y aprecian el juego cada ocho días en nuestros estadios y según este informe, no están de acuerdo con lo que ven. (Con información de Cristina Sánchez y Yesme Cortés)
Dorlan Pabón, de traidor a ser el mejor
Apenas 10 meses después de su partida, Dorlan Pabón regresó a México por su revancha. Para entonces, había partido de Monterrey sin despedirse de una afición que cada partido llena las gradas del estadio Tecnológico, por lo que la acción del colombiano, al aceptar la oferta de fichar por Valencia, la consideraron una traición.
¿Por qué dolió tanto la partida de Dorlan? En seis partidos anotó tres goles y la esperanza de una dupla letal junto a Humberto Suazo sólo quedó en la imaginación de los seguidores.
Pero tras su paso fugaz por España y luego en Brasil, llegó a Monterrey y dijo: “Me quiero quedar aquí toda mi vida”. La razón de su promesa radica en que en su primer torneo completo quedó como subcampeón goleador (11 goles), con la mejor frecuencia de goles del certamen (un tanto cada 104 minutos) y sólo una suspensión en la última jornada evitó que alcanzara a los líderes.
Pabón Ríos fue el mejor futbolista del futbol mexicano, según el “Primer Informe de Calidad de la Liga MX” realizado por El Economista. En México, el colombiano encontró además del perdón de su afición, la continuidad y goles que desde el 2011 lo abandonaron.
Pabón tuvo 14.6% de las preferencias de los encuestados; le siguen Oribe Peralta (13.4%), y Miguel Layún (11.6%), que sin protagonizar estadísticas, superaron a los campeones de goleo. (Con información de Eduardo Hernández)