A casi 2 años del retiro de Francesco Totti quien siempre jugó con la Roma, equipo de sus amores es cada vez menos común ver que un futbolista consolidado con la afición del equipo en donde juega se retiré con el club en donde está destacando.
Y es que actualmente es muy común que los equipos de primer orden en Europa pongan sus ojos en aquellos jugadores que comienzan a destacar para fortalecer sus filas y reforzar posiciones y entre rumores constantes de los medios de comunicación y las fuertes ofertas económicas, los futbolistas en cuestión terminan enrolándose en dichos clubes con resultados bastante contrastantes como el éxito de CR7 en el Real Madrid, la corta estadía de Thierry Henry el Barcelona o el paso irregular de Kaká por el club merengue.
Sobre lo anterior en los últimos días ha circulado la noticia que otros 2 nombres se sumarán a la lista de jugadores que han sido referentes en los últimos años en sus clubes y que abandonarán sus clubes en búsqueda de nuevos retos en equipos de primer orden en Europa: por un lado, a Eden Hazard se le vincula con el Real Madrid y a Antoine Griezmann con el Barça, aunque igualmente el PSG y el Inter de Milán lo buscan.
Viendo racionalmente la decisión de ambos jugadores es comprensible la decisión de enrolarse en clubes en donde alcanzarán mayor fama, un mejor salario y probablemente muchos más logros deportivos, aunque esto mismo hacen más fuertes las palabras de Il Capitano quien, aunque recientemente comentó que alguna vez se vio tentado a jugar en el Real Madrid afirmó en la revista de su país ' La Repubblica ' que “Siempre dije que solo usaría una camisa y soy un hombre de palabra” y que “Hubiera arruinado una carrera de 25 años”, esto con referencia a la posibilidad de llegar a un balompié de menor nivel para sus últimos años como futbolista.
Finalmente queda en cada futbolista buscar ya sea recorrer el camino a convertirse en una leyenda, el cual está plagado de un sinfín de tentaciones u optar consolidarse en clubes poderosos los cuales ven cada fichaje como sinónimo de resultados inmediatos y donde en muchos casos las expectativas que tienen tanto el club, sus aficionados y los medios especializados no se ven cumplidas. Así pues, casos como el del Il Capitano cada vez será más difíciles de ver en el mundo del futbol por cómo está construido actualmente, aunque quizás podríamos ver algo similar en algunos años con Lionel Messi.