Por Asairi Nava
El Día de San Valentín siempre llena la atmósfera de romance y hermandad. Aunque las canchas de futbol no necesitan un día especial para que los jugadores demuestren los unidos que están con alguno de sus compis de profesión. Para muestra, estos cinco ejemplos de amor en el terreno de juego.
Götze y Reus
Friends forever! pic.twitter.com/XVaMAZ1YJC
PUBLICIDAD— Bayern & Germany (@iMiaSanMia) July 13, 2014
Compartieron muchos años el vestidor, tanto en la selección francesa como en el Arsenal. Esto generó un gran vínculo entre los dos que al estar en la cancha no necesitaban ver dónde estaría uno u otro, con el simple hecho de mandar el balón al hueco sabían que ahí llegarían sin problemas.
Messi y Agüero
Nunca han coincidido en un equipo profesional durante su carrera, pero la Selección Argentina se encargó de crear un vínculo tan fuerte en ellos que a pesar de la distancia siguen muy unidos. En cada concentración no hay nadie que los separe, a donde va uno lo acompaña el otro y en el campo de juego el entendimiento es increíble.
Cristiano y Marcelo
El ambiente del Real Madrid no podía ser mejor sin ellos, en cada entrenamiento y juego siempre buscaban sacar risas y una que otra ovación con sus grandes jugadas. Marcelo es el socio que CR7 siempre quiso tener, además de anotar muchos goles a pases suyos, siempre innovaban con sus festejos.
Suárez y Messi
El uruguayo encajó a la perfección en el sistema del Barcelona desde su llegada, y le bastaron pocos minutos para hacerle ver a Leo que podía confiar en él sin problema. Esa confianza se tradujo en una gran amistad y una verdadera pesadilla para todos los contrarios cuando los dos están sintonizados.
Ramos y Özil
La amistad entre el español y el alemán fue gracias a su coincidencia en el Madrid. Normalmente todos los balones que obtenía el zaguero terminaban en los pies del mediocampista germano, entendimiento que se trasladó fuera de canchas hacia una amistad tan increíble que a pesar de estar separados llevan consigo cada juego algún regalo que se hicieron en su despedida.
Plus: Thierry Henry y Robert Pirès
Henry hizo muchos goles con bombones que Robert le mandaba sin pensar como recibiría el balón, simplemente sabía que el delantero definiría a placer. Esto pasaba porque estuvieron tanto tiempo juntos que más que amigos o compatriotas, eran hermanos. El Arsenal se vio beneficiado muchas veces gracias a esta relación.