Mas de 20 años al frente de Arsenal; grandes figuras mundiales se forjaron bajo su cargo, unos invencibles legendarios con su firma. Arsene Wenger no solo los instruyó con conceptos de futbol, también se dio el lujo de quitarle el pésimo vicio del cigarro a uno de sus porteros.
Wojciech Szczesny llegó con los Gunners juveniles en el 2006 y llegó al primer equipo para la temporada 2009/10, fue un 22 de septiembre de 2009 cuando debutó. Aunque le costó trabajo afianzarse en el primer equipo, lo consiguió sobre su compatriota Lukasz Fabianski, sobre Manuel Almunia e incluso cuando llegó Ospina continuó siendo el titular.
Sin embargo, en el 2015 fue sorprendido fumando en las regaderas, por lo cuál fue acreedor a una multa y perdió la titularidad.
Despues vino Petr Cech y tuvo que ser acomodo en la Roma. Ahora es el heredero de las glorias de Buffon en la Juventus, cosa que no hubiera logrado sin la tutela de Wenger para alejarse de los vicios y dedicarse como todo un profesional al futbol.