Por Asairi Nava
En Inglaterra, tanto los medios como los jugadores, culpan a Guardiola del título obtenido por el City. Aseguran que su obsesión por los detalles produjo un equipo bien acoplado y dinámico. ¿En qué se fijó? ¿Qué cambió? Aquí se los decimos.
Remodelación del vestuario
Modificó el vestuario a forma circular para que los jugadores interactuaran más entre ellos y así se sintieran más unidos. Además, les puso un poema de Tony Walsh para que al leerlo tuvieran en mente el sentir de los aficionados para salieran a rompérsela en la cancha.
Reformó el túnel de los vestuarios
Pidió que pusieran paredes transparentes para que no sólo el poema les generara empatía con los aficionados. Fue una forma para que los fans vieran de cerca a sus ídolos. Vaya que le gusta tocar las fibras sensibles de sus pupilos. Bueno, no faltaron aficionados que pensaron en apreciarlo como un zoológico.
Dieta estricta
La valió que algunos jugadores contaran con chef personal, así como las rabietas que pudieran hacerle. Se llevó a Silvia Tremoleda, nutrióloga, para ponerlos a comer lo que ambos creían mejor para el plantel.
Que todos hablen inglés
Una excelente idea que le ayudó a que no se formaran grupos dentro del vestuario debido a los idiomas o nacionalidades de cada jugador. Varios tuvieron que meterse a estudiar. Es algo que deberíamos hacer todos.
Corrigió problemas a algunos jugadores
Detectó lo que les fallaba para ayudarles a corregir o pulir lo que creían defectos. Leroy Sané y Raheem Sterling están agradecidos con él porque pudieron perfeccionar su técnica, al igual que conducción del balón.