Las claves de la goliza del Real Madrid en Turín 

Por Ubaldo González

¡El Madrid a Semifinales! Un contundente 3-0 le dará tiene al Real Madrid cerca de la siguiente ronda de Champions. Cristiano inspirado y convertido en un monstruo se hizo presente con un doblete y un golazo digno del Puskás. 

Aquí están las razones del triunfo de los merengues en el Juventus Stadium:

GOL DE CRISTIANO

Un error tempranero de la defensa de la Juve fue la clave para que Isco y Marcelo hicieran una pared que terminó en los pies de CR7, quien mandó el balón al fondo de las redes.

Keylor Navas hizo su chamba

Los primeros 20 minutos del partido fueron de los merengues pero se diluyeron poco a poco, esto provocó llegadas de los italianos que fueron detenidos por San Keylor. ¿Todavía piensan reemplazarlo?

polémica en el partido

En la Chaaaampioooons hay de todo, así como hay jugadas de otro mundo también hay polémicas arbitrales y en el primer tiempo se dieron dos jugadas muy raras. Primero a Casemiro le rebotó un balón en la mano y luego derribaron a Dybala dentro del área. Las dos jugadas estuvieron apretadas y no se marcó nada. ¿Con el VAR habría sido otra historia?

¡GOLAZO DE CRISTIANO rONALDO!

¡Una obra maestra! Cristiano Ronaldo demostró que nadie juega como él, su equipo estaba al borde del empate y llegó el Comandante para sacar el pincel y dibujar una chilena perfecta que terminó en la portería de Buffon. También aplicó un Ronaldinho porque con este golazo puso de pie a la gente de Turín.

EXPULSIÓN DE DYBALA

Con el gol de Cristiano se acabó el partido, lo que ocurriera estaba de más y un ejemplo de esto fue la expulsión de Paulo Dybala, la desesperación le ganó y le clavó una plancha a Carvajal, como consecuencia se ganó la roja directa. Dura ausencia para el de vuelta.

Gol de Marcelo

La eliminatoria la sentenció este hombre, un 3-0 que es muy pesado de remontar y más si es en contra del Real Madrid. Una jugada por la banda, luego una buena pared para que Marcelo se quitara a Buffon con un recorte muy bueno y terminar la jugada con una patada al estilo Karate Kid.