Por Emmanuel Pérez de Lara
No se espanten juanáticos, no les voy a hablar de animales ni iremos de paseo a ningún zoológico, el día de hoy toca platicar sobre Thomas Edward Patrick Brady Jr. Tom Brady. O como dirían los gringos: he's the GOAT!
Tranquilos, no es que sea un chivahermano más, aunque goat literalmente se traduzca en chivo o cabra. En este caso son las siglas en inglés para denominar al Mejor de Todos los Tiempos –Greatest of All Time– aunque algunos tengan sus dudas si Brady realmente lo es. Hoy acabaremos con ese debate, así que prepárense.
Los números
Para los “clásicos” y aficionados de antaño de la NFL, el debate sobre quien es el mejor mariscal de campo de todos los tiempos recae sobre dos personas principalmente, Tom Brady y el miembro del Salón de la Fama Joe Montana, pasador de los San Francisco 49ers en la década de los 80.
Joe Montana ganó cuatro Super Bowls en el mismo número de apariciones, algo que parecía imposible de superar. Pero imposible es una palabra que no existe para Tom Brady, acumula siete apariciones en el Súper Domingo y adivinen ¿cuántos campeonatos lleva?
Así es juanáticos, vieron bien la imagen, lleva cinco campeonatos de NFL en 17 años de carrera. Nadie tiene más, ¡absolutamente nadie! Es el jugador con más títulos en toda la historia y esta temporada se perfila para ponerse un anillo más.
Montana fue nombrado MVP -Jugador Más Valioso- en tres de los cuatro Super Bowls que jugó. Brady ya lo superó, cuenta con cuatro distinciones de este tipo en cinco de sus campeonatos.
En las estadísticas de su chamba -lanzar el balón- Joe Montana completó a lo largo de su carrera, 273 pases para Touchdown. Brady, quien insisto, sigue jugando lleva 475, o sea 74% más que la leyenda de los Niners.
Hay dos números donde Brady es demoledor sobre Montana. El primero es en las yardas por aire que completaron. El de San Francisco acumuló 40 mil 551, pero Brady hasta el momento lleva 64 mil 389 ¡Lo supera por más de 20 mil!
Las victorias en postemporada, son otro impactante punto a favor del QB de New England, que suma 25, nueve por encima de Joe Montana.
Si bien la NFL y el juego han evolucionado mucho en los últimos años, las estadísticas que respaldan a Brady son asombrosas y parecen complicadas de superar.
El carácter
Por números Brady se lleva de calle a quien le pongan enfrente y tiene un par de argumentos más en su favor. Los miembros de su equipo y su coach lo consideran un líder excepcional, capaz de echarse el equipo al hombro y cargar con él las yardas que sean necesarias. Para muestra dos botones.
En el Súper Bowl XLIX se enfrentaron a los campeones defensores, Seattle Seahawks, quienes además fueron la mejor defensa de toda la liga durante la temporada regular.
Para el inicio del tercer cuarto, Seattle derrotaba 24-14 a los Patriots. Nunca en la historia del Súper Tazón, un equipo se había sobrepuesto a una ventana de más de siete puntos. Pero con Brady hemos aprendido que nunca debes decir nunca.
Los Pats de la mano -literal- de Tom Brady, anotaron 14 puntos y no recibieron ninguno para coronarse en uno de los juegos de campeonato más excitantes que han existido en la historia.
Dos años después, llegaron al Super Bowl LI, para enfrentar a los Atlanta Falcons. Fue la séptima aparición de Brady en el Súper Domingo y los Patriots eran amplios favoritos en las casas de apuestas… los Falcons tenían hasta ese momento otra opinión, se fueron al medio tiempo ganando 21-3 y en el primer drive de la segunda mitad ampliaron su ventaja con un Touchdown. Atlanta ganaba 28-3 a la mitad del tercer cuarto. Dos años atrás los Pats habían remontado 10 puntos, pero ¿25? ¡ni locos!
Brady y los Pats protagonizaron la remontada más grande en la historia del Súper Tazón, lograron empatar el juego a 28 puntos y forzaron el tiempo extra. Con un Brady en su mejor versión, anotaron los seis puntos en la primera serie del tiempo extra que les dio un anillo más.
Tom fue nombrado MVP y remarcó por qué es el mejor jugador de todos los tiempos. Se ganó a pulso el mote de la Cabra Brady.