La aventura que comenzó en 1999 en Argentina con el modesto Almirante Brown culminó este martes en Tijuana. Federico Vilar, portero que dejó huella en el balompié mexicano, anunciará su adiós a las canchas.
Vilar fue una de las más destacadas figuras del Atlante en los últimos tiempos. Desde su llegada en 2003 y hasta su transferencia a Morelia en 2010, el guardameta se consolidó como el hombre más importante de los Portos, siendo la pieza fundamental en la conquista del título en el torneo Apertura 2007.
El buen nivel mostrado por el sudamericano lo llevó a ser convocado por Diego Armando Maradona, entonces técnico de la Albiceleste, durante las eliminatorias de Sudáfrica 2010, aunque finalmente no jugó un solo minuto.