El árbitro Daniel García salvó la vida a un futbolista durante un partido amistoso regional entre los equipos Urgavona y Villa del Río.
El partido estaba cerca del final cuando un jugador del Urgavona, Castillo, comenzó a convulsionarse tras sufrir un choque de cabezas con Madueño.
“Vi que el jugador estaba convulsionando, con los dientes cerrados. Intenté abrirle la boca en un momento de bloqueo general de los allí presentes”, explicó el juez central a la agencia EFE.
La situación se tornó dramática en unos segundos. “Me agaché e intenté por todos los medios abrirle la boca y sacarle la lengua. Pude meterle las uñas entre los dientes y luego los dedos. Le abrí la boca y afortunadamente ya habían aparecido dos enfermeras”, abundó.
El futbolista fue llevado al hospital Reina Sofía de Córdoba. Luego de estar en observación y determinar que se encontraba fuera de peligro, recibió el alta médica.