Por Carlos Herrera Luyando
Directores, productores, guionistas, actores. Los Ángeles han visto eso y más, y el último partido de Kobe Bryant tuvo un final típico de ese lugar, de Hollywood.
En donde las estrellas desfilan, donde los turistas buscan la mejor foto con ese letrero enorme y donde se filman las películas más taquilleras del mundo, ahí donde la noche del 13 de abril se rodó un filme dramático, feliz, nostálgico, protagonizado por The Black Mamba.
Casi todo el partido abajo en el marcador pero el protagonista no podía ser otro, a pesar de las personalidades que inundaron el Staples Center. Triple, crossover, colada, de todos los lados del parquét para llegar al tercer acto del guión y conclusión de su carrera, ovacionado y glorioso.
Dos décadas en un mismo equipo llegaron a su fin, en aquél equipo de Wilt Chamberlain, de Kareem Abdul-Jabbar, de Earvin Johson, de Shaquille O'Neal.
¿Quién podrá igualar lo hecho por ellos? El tiempo lo dirá.