Parece que estamos en la semana de las sanciones fuertes, pues en cuestión de días volvemos a ver un castigo duro para un futbolista. El tema es que, a diferencia de la de Rodrigo Bentancur, en esta ocasión Nuno Santos del Sporting de Lisboa se ganó el castigo que recibió por haber agredido a dos aficionados.
Aunque se torna repetitivo, parece que cada vez estamos más rodeados de violencia en el deporte. Y, en este caso, las noticias llegaron directo desde Portugal. Es que, allá por el 3 de agosto en la final de Supercopa de Portugal entre Sporting y Porto, Nuno Santos tuvo un gesto muy feo que terminó lastimando a dos aficionados.
Pese a que el carrilero por izquierda ni siquiera formó parte del banquillo del Sporting de Lisboa, Santos se encontraba en las gradas y, por un motivo que se desconoce, el futbolista rompió un vidrio protector y terminó lastimando a un aficionado y a su hija, que finalmente tuvo que visitar el hospital por las lesiones que sufrió.
Teniendo en cuenta todo esto, el tribunal que analizó el caso decretó que Nuno Santos deberá cumplir ocho jornadas de sanción además de pagar 3,570 euros, una cantidad de dinero algo baja entendiendo el contexto de la agresión.
Sumado a esta sanción, Santos se rompió los ligamentos cruzados, así que probablemente volverá a ver acción en la próxima temporada. ¿Recibirá su sanción luego de su lesión o se salvará por el hecho de estar lesionado?