Por Alejandro Miranda
Bien dicen que no hay plazo que no se cumpla, ni deuda que no se pague. Algo así le ocurrió a Zinedine Zidane quien debutó a su hijo Luca en el arco del Madrid después de tanta espera y morbo al rededor de ellos.
Luca fue contrario a su padre y hermanos, él decidió pararse bajo los tres postes y defender a capa y espada a su equipo. En las juveniles merengues siempre fue tomado en cuenta desde que su jefe era entrenador; cuando Zizou subió al primer equipo las esperanzas crecieron, pero debían llevárselo con calma.
Se le registró como tercer portero, porque Keylor era el mandamás, después Kiko Casilla y desbancó a Rubén Yañez que fue tercero en la lista durante un tiempo.
Zinedine iba a dejar que la prensa se lo devorara por poner a su hijo en la campaña, más porque se le recuerda un erro garrafal en un partido donde se volteó y demostró miedo al balón. Ambos fueron prudentes y esperaron hasta el final de temporada cuando todo estaba más que decidido.
Debutó a su chaval en el empate contra el Villarreal, un partido redondo donde se comió dos pepinos, pero igualmente tuvo buenas atajadas. No tenía minutos registrados, todo el equipo se rifó al menos un minuto, así que la oportunidad era la indicada. Eso sí, al final del juego dijo sentirse orgulloso, pero algo triste por el empate
?? ¡Antes de debutar en #LaLigaSantander, Luca Zidane recibió el apoyo de sus capitanes @SergioRamos y @MarceloM12! ??#VillarrealRealMadrid pic.twitter.com/CeLXNGBr16
PUBLICIDAD— LaLiga (@LaLiga) May 19, 2018
