La Comisión Disciplinaria dio a conocer el castigo de los expulsados de esta jornada. El Piojo Herrera no va a estar en la banca un partido. La razón es que le faltó el respeto al árbitro al final del partido contra León.
Seamos honestos, le salió barato, el Piojo estuvo muy cerca de perder la cabeza después de que el árbitro no invalidara el gol con el que ganó León al haber dos balones en la cancha al mismo tiempo. Eso detonó la ira de Miguel, que al finalizar se fue a gritarle a los árbitros. Le salió bien, un partido de suspensión no es nada.