Por Joel López
Aunque muchos Juanáticos del América creían que el Socio Águila Futbol Club había desaparecido en 2009, tal parece que no fue del todo cierto. Desde hace algunos años, la compra de jugadores procedentes del equipo Tijuana por parte del Ame es una constante.
Desde Pablo Aguilar, Cristian Pellerano, Darío Benedetto, Javier Güemez, Guido Rodríguez, Carlos Vargas, hasta los recién desempacaditos Henry Martín, Víctor Aguilera y Joe Corona; las adquisiciones viajaron de la frontera a Coapa. Eso incluye a dos entrenadores que ya le dieron títulos al equipo, Miguel Herrera y Antonio Mohamed.
Lamentablemente para el las Águilas, la mayoría de estás adquisiciones no han sido nada rentables, ya que Pellerano y Güemez pasaron sin pena ni gloria acompañados de lesiones. Benedetto trató de ser referente, dio algunas alegrías, pero las lesiones y fallas garrafales terminaron por enviarlo a Boca (por cierto está lesionado). Guido se caracterizó el torneo pasado, por ser la causa de las rojas más rápidas de los árbitros y Vargas es un novato que para muchos, no merece la camiseta y aún no demuestra nada.
Caso aparte es la actuación de Pablito Aguilar -recuéerrrrrrrrdame hoy me tengo que ir mi amor-, quien se destacó por su entrega, pasión, esfuerzo y goles con lo que se ganó el cariño de toda la afición, lo cual causó la evidente molestia de los últimos días con su salida y que ya es un hecho al verlo de nuevo con la playera de Xolos.
Habrá que esperar que sucede con los tres nuevos refuerzos, que de primera instancia no son del todo el agrado de los americanistas. ¿O qué dicen ustedes Juanáticos?
De Tijuana, el “Socio Águila” de los últimos tiempos, sólo diremos que cada uno de los jugadores transferidos en su momento fueron en su mayoría referente y queridos por la afición y pues la directiva tiene buen ojo para los extranjeros (sobre todo argentinos) y es buena, muy buena, para los dineros, el cash, los negocios.
