Por Diego Pacheco
No podemos negar que este hombre es el mejor tenista de la historia. Actualmente suma 20 Grand Slams, las máximas competencias de este deporte. Nos queda claro que no hay nadie más grande, pero ¿qué hubiera pasado si Roger se declinaba por el futbol en vez del tenis? En una ficción para rendirnos ante el rey del deporte blanco, que es futbolero de corazón, así habría sido su trayectoria. Lean.
Debut y primeras pinceladas – FC Basel
En 1991, cuando tenía 10 años, llegó un niño a las inferiores del club suizo. Era Roger Federer. Fue conocido en la ciudad por ser el mejor en su categoría y haber ganado varios trofeos infantiles. Decidieron darle una oportunidad al chamaco que se desempeñaba como mediocampista defensivo, era un motor ya a su corta edad.
Con 17 primaveras, Roger ya jugaba en el plantel Sub-20 como parte fundamental de su equipo. Eso le valió para ser llamado al primer equipo por su entrenador y la rompió. Al finalizar el año fue nombrado por el diario inglés The Sun el mejor jugador menor de 19 años, ya era toda una sensación.
Primera nominación al balón de oro
Su majestad aún no se movía del equipo de sus amores a pesar de ser pretendido por media Europa. En el 2000 fue considerado por primera vez dentro de los mejores 30 jugadores del mundo, apenas con 19 años ya era titular en la selección de Suiza.
Su destape como figura mundial – Fichaje por el Liverpool
2001 fue el año que lo catapultó como estrella mundial. Ganó todo en Suiza, Liga, Copa y Supercopa. Era momento de emigrar a un futbol de más alto nivel. Su destino fue Liverpool con Houllier como DT, quien fichó a la joven sensación por 40 MDE, cifra récord para un jugador tan joven en ese entonces. El entrenador francés vio en el chaval un estilo que tiene cabida en Anfield y de inmediato se compenetró con los colores de los Reds.
Gerrard, su mejor socio
En su nuevo equipo fue muy bien recibido por Steven Gerrard, que en ese entonces era la figura. Formaron una dupla de ensueño en la media y aterrorizaron a sus rivales. Ganaron la Community Shield pero se quedaron con las ganas de levantar la Premier, fueron subcampeones de la 2001-02.
Galáctico
Por distintos problemas en el vestuario, Roger decidió partir del club en 2004. Después de intensas negociaciones entre el Milán y el Real Madrid, decide unirse al club blanco y ser parte de Los Galácticos. Era un intocable en el esquema merengue tras haber llegado a sustituir a Claude Makélélé.
Primer y Segundo balón de oro
A pesar de que en 2005 el Real Madrid se caía a pedazos, la FIFA lo nombró mejor jugador del mundo, sin ser delantero, cosa que era muy extraña. Vivía su mejor momento y lo alargó un año más. Repitió como ganador del trofeo después de brillar en el Mundial con Suiza.
Peor temporada
Para la 2012-13, el Madrid por fin ganó La Liga. Para Roger no fue una gran temporada. Con la llegada de Modric perdió un poco de protagonismo y fue relegado a la banca en varias ocasiones. Ya tenía 30 años y su energía no era la misma.
La décima
Volvió al estrellato y se quedó con el subcampeonato del Balón de Oro tras una excelsa temporada donde logró conquistar junto con el Real Madrid una ansiada Champions número 10. Fue pieza clave del equipo aunque con su selección no logró trascender en el Mundial de 2014.
Salida del Real Madrid
Rafa Benítez fue nombrado entrenador del equipo. Lo relegó a la banca al preferir a Kroos y con mucho dolor, se despidió de la entidad merengue a sus 34 años.
MLS
Lo fichó el Galaxy. Confiaban en el toque sutil que poseía y su habilidad para hacer jugar a todo el equipo. También querían reunir a los dos socios de Anfield. En Los Ángeles se reencontró con Gerrard y nos hicieron recordar los viejos tiempos. Dupla mágica.
Regreso a casa
Para la 2017-18, Federer extrañaba su hogar. Es por eso que el Basel lo ficha por 2 MDE y regresa a casa con 36 años, mucha experiencia y aún con el toque mágico que lo caracteriza. Da sus últimos pasos como futbolista en el equipo de sus amores, el que lo vio nacer y con el que se va a retirar.