Luis Enrique apareció en conferencia de prensa con el rostro compungido aunque tranquilo. El entrenador del Barcelona, visiblemente contrariado por la derrota de su equipo por 4-0 en San Mamés, reconoció la responsabilidad de la hecatombe catalana frente al Athletic.
“No hemos ofrecido nuestra mejor versión ni hemos estado afortunados en varias de las acciones”, admitió al tiempo de decirse muy preocupado por la debilidad que han mostrado los blaugrana en zona defensiva, recibiendo ocho goles en dos partidos.
“Nunca he jugado un partido fácil contra el Athletic, ni siquiera cuando era jugador”, agregó el timonel.
Sin embargo, Lucho se mostró confiado en una reacción para el duelo en el Camp Nou. “Si alguien puede remontar esta eliminatoria, es el Barça”, sentenció con seguridad.