Este martes, Wayne Rooney busca el gol histórico con la Selección de Inglaterra, una vez que igualó a Bobby Charlton con 49 anotaciones. Pero también es cumpleaños de Romeo Beckham, hijo del exjugador y seleccionado inglés, y su regalo de 13 años fue entrar a la cancha de Wembley de la mano de Wayne. Su cara lo dice todo.