Por Alonso Cerón
Después de esta temporada de transición, si nos ponemos amables con la pésima campaña del Real Madrid, la baraja de nombres para suceder a Zidane incluye a varios prospectos. Uno de ellos es el entrenador de los Spurs, Mauricio Pochettino, quien no ve con malos ojos llegar al Bernabéu.
1. MEDIa cancha, LA BASE DE TODO
El ya clásico esquema del argentino de 3-5-2 que puede flexibilizarse a un 3-1-4-2 en las labores de defensa, puede encajar de manera perfecta en el Real Madrid. El juego en la media es gran arma para contrarrestar los típicos enroques que los blancos enfrentan en Liga y Copa, sobre todo de equipos que se crecen al ver a Cristiano y compañía.
2. cuidadoso
El último sudamericano que dirigió a los merengues era demasiado precavido en defensa, no soltaba a los delanteros y siempre perdía con el Barcelona. Con Pochettino habría atenciones atrás, pero sin llegar a los extremos de replegarse en juegos importantes, donde los que meten los goles deben mostrarse, no esconderse.
3. FICHAJES INTELIGENTES, NO SOLO BOMBAS
Ya estuvo de bombas mediáticas y que en la cancha simplemente no den resultados. Real Madrid ya se parece al Cruz Azul. Con el argentino en la banca, los fichajes serían más precisos, basado en las necesidades del equipo y el estilo de juego, no en las camisetas que venda.
4. FUTBOLERO TRADICIONAL
El todavía entrenador del Tottenham es un convencido de las formas tradicionales del juego. No cree en el VAR y como buen argentino es marrullero con ideas al filo del reglamento. Estas características aplicadas a un grande como el Real Madrid lo harían todavía más temible de lo que es.
5. No le gusta el BARCELONA
Pochettino sacó del hoyo al Espanyol. En esa época aprendió a amar al equipo catalán. De hecho, alguna vez declaró que preferiría trabajar en una granja antes que dirigir al Barcelona. Otro punto a favor del argentino para ser entrenador del Real Madrid.