Por Rubens Buenrostro
Ya lo dice el viejo y conocido refrán: “El que es perico, donde quiera es verde” y cualquier selección nos la… pone bien difícil aunque terminamos plantando buena cara. Como buenos futboleros que somos, nos encanta apasionarnos, soñar que todo lo podemos; si no, pregúntenle a los del Cruz Azul.
Mentalidad de hierro contra rivales fuertes
Si jugar contra potencias se trata, los aztecas lo hacen de maravilla. Las cosas cambian, la sed de triunfo se acrecienta y el verdadero talento emana. Desparramando la bocha al tú por tú, no hay rival que detenga a nuestros killers del área.
Si Chichadios en el ataque ¿quién contra nosotros?
¿Cuántas veces no ha callado bocas nuestra deidad leguminosa? Ya ha anotado en Sudáfrica 2010 y en Brasil 2014. Francia, Argentina y Croacia sus clientes, nada más para que no digan que no les avisamos.
Excelentes pasadores de bocha
La sana y bonita competencia que hay entre los muchachos del Profe Osorio, hace que tengamos buenos jugadores, de esos que acarician la bocha y te colocan un pase de gol con las manos. Si a eso le agregamos que contamos con gambeteadores y laterales que gustan de sumarse al ataque, los delanteros las terminaran metiendo hasta con la nuca.
Killers con olfato goleador
Aunque en realidad son pocas las opciones que podemos barajear, contamos con un par de rompe redes con experiencia olímpica y mundial. O bien, siempre queda el recurso de utilizar a los extremos para echarles la mano, de cualquier forma de que habrá goles, los habrá. De 100 oportunidades, unas cuantas terminarán por guardarse en la portería. ¡Si lo sabrá el Matador Hernández!
Chuky es nuestro pastor y con él nada nos faltara
Reciente campeón con el PSV, se mantiene en la pelea por el campeonato de goleo. No hay más que agregar, el chamaco está on fire, de lo más regular que hay en selección, es uno de los consentidos del Profe. Ya demostró que los equipos europeos no le dan miedo, anda en pleno romance con el gol.
Gastronomía envidiable
La base de todo éxito se deriva de unos buenos taquitos con su tortillita azul, con su embarradita de frijolitos, con su buen pedacito de chicharrón, bañado con salsita molcajeteada bien piscosita. Así todos los delanteros de la selección no tendrán pretextos para jugar desalmados y no marcar goles. Barriga llena, corazón contento ¿A poco no?
Rusia, ahí te vamos….
