Por Surisaday Valencia
Con la reciente llegada de Alexis Sánchez a los Red Devils, el Manchester United está de nuevo en boca de todos. Sin embargo (y por sí ustedes no lo sabían) hay un pasado siniestro en el club que recuerda a uno de los mejores jugadores que jamás hayan fichado y del que la mayoría, muy poco han oído hablar.
El Debut
Con tan sólo 15 años, en abril de 1953, Edwards debutó en Primera División como centrocampista del Manchester United. Rápidamente se convirtió en uno de los futbolistas más aclamados, incluso por las figuras que estaban en el equipo como Sir Bobby Charlton. Las atajadas y asistencias que realizaba el muchacho marcaron el inicio de una época triunfal para el United que peleaba por el título como campeón de Europa contra el glorioso Real Madrid de Di Stéfano.
Pero como no todo puede ser así de fantástico y maravilloso, la carrera del joven promesa fue víctima de una historia catastrófica en el futbol a nivel mundial conocida como “La tragedia de Múnich”.
Vuelo 609
Después de conseguir su pase a semifinales para la Copa de Europa del 57/58 (Hoy conocida como UEFA Champions League) el United realizaría su viaje de regreso a Manchester desde Serbia. Antes de despegar, los pasajeros fueron notificados sobre la escala que tendrían en Múnich para recargar combustible. Una serie de eventos desafortunados y las pésimas condiciones climáticas, provocaron que al querer aterrizar, el vuelo 609 de British European Airlines se estrellara en un terreno colindante al aeropuerto provocando la muerte de 23 personas.
A pesar de que Edwards no falleció al instante, en el accidente uno de sus riñones se perforó gravemente necesitando el reemplazo por uno artificial que llegó 32 horas después de su intervención; el daño en su cuerpo le provocó una hemorragia general causándole la muerte a los 21 años el 21 de febrero de 1958.
La huella
Dudley es el poblado donde Duncan nació. Después de pasar a mejor vida, se levantó una estatua en su honor, la cual es visitada por hinchas del United melancólicos sobre el futuro que pudieron tener The Busby Babes y todo lo que habían conseguido hasta antes del desafortunado 06 de febrero de 1958.
Aún cuando Sir Bobby logró construir una plantilla exitosa con los Red Devils, al equipo le costó 10 años conseguir la Copa de Europa; la realidad es que hasta los tiempos de Rooney fue muy difícil recuperar la escencia y dinamismo con la que jugaban los muchachos de Matt Busby.