Antonio Briseño hace un año sorprendió a todos, se armó de valor y se lanzó a Portugal. El Feirense lo fichó, en su primera temporada no se pudo mostrar mucho, apenas mil 562 minutos. Ahora parece que las cosas cambiaron.
Con la adaptación de un año en tierras portuguesas, el Pollo ya se ganó la confianza de Nuno Manta (su técnico). En los tres primeros partidos de la Primeira Liga ha jugado los 90’ en todos y no lo han amonestado. El equipo va invicto con dos triunfos y un empate. Sólo han recibido un pirulo.
Briseño calladito se puede convertir en figura de su equipo. Apenas tiene 24 añitos, el salto a un mejor equipo en Europa lo puede dar. Si sigue así, hasta la selección lo podría llamar.