“Estoy mas solo que un perro”, afirmó días atrás Paco Jémez cuando se le preguntó por su futuro una vez que parece que el Rayo Vallecano se mantendrá en la élite un año más. Así de directo y popular es el técnico del equipo madrileño, el mismo que recibe hoy al cuadro de los nueve goles; el Real Madrid de la bestia que está de vuelta.
El técnico del Rayo no deja indiferente a nadie. Con su contrato a punto de finalizar, de ahí la soledad, y con una más que complicada continuidad en el Rayo, el que fuera defensa del equipo Vallecano y del Deportivo lleva dos temporadas dejando atrás Vallecas, pero al final nunca termina de salir.
El principal motivo no es otro que los 1,2 millones de euros que recibe y que le convierten en el sexto entrenador mejor pagado de La Liga. La pasada campaña nadie pagó los 6 millones de euros que le liberaban ni tampoco encontró nadie que mejorara su sueldo en Vallecas.
Ahora, ya sin contrato de por medio, la continuidad sí que parece imposible. En una primera, tiene pinta de que terminará siendo la última, el técnico pidió doblar lo que percibe, algo que un club como el madrileño no puede alcanzar.
Lo cierto es que Paco firma los mejores números de la historia del Rayo, pero su caché subió como la espuma cuando Guardiola, quien fuese compañero suyo en la selección española, habló de él como su posible sucesor en el Camp Nou por aquello del buen trato del balón que hace el Rayo. Y es que por Vallecas no se mueve un defensa que tenga el pelotazo como ideario.
