Henrikh Mkhitaryan fue amenazado por las autoridades de Azerbaiján. En caso de pisar el aeropuerto de Bakú, para disputar el duelo de fase de grupos de la Europa League en contra de FK Qabala, en octubre próximo, será arrestado.
La razón es que Mkhitaryan es un futbolista armenio, y Armenia mantiene un conflicto con Azerbaiyán por el control de la región de Nagorno-Karabaj, una zona azerí que limita con ambos países y se autoindependizó en 1988 con el apoyo de Armenia, lo que causó una guerra entre ambos estados.
En consecuencia Nagorno-Karabaj, a pesar de estar poblado en un 75% por armenios de etnia indoeuropea y religión cristiana, fue integrado como territorio autónomo en la República Socialista Soviética de Azerbaiyán, cuya población es étnicamente altaica y de religión musulmana.
El delantero armenio estaría en la mira de las autoridades azeríes debido a que en 2011, el atleta llegó a entrar en el país, precisamente en la región del conflicto, situación que causaría su detención de manera automática.
El portavoz de Borussia, Sascha Fligge, explicó al canal alemán Sport1 que esperan no tener ningún problema con Mkhitaryan y pueda disputar la fase de grupos de la Europa League.
“Espero que esto no suceda. El Henrikh es un jugador muy importante para nosotros, con sus brillantes actuaciones en las últimas semanas “.
