Alan Pulido lo está pasando bien. Después de año y medio prácticamente condenado a la banca, a la tribuna y a la falta de protagonismo hoy disfruta jugar con frecuencia en el Olympiacos. No vivía esa regularidad desde que estaba en la Liga MX. Está contento y olvida el rencor. Revela que quiere retirarse en Tigres, el sitio donde comenzó su carrera.
Es cuestionado por Fox Sports respecto al conflicto legal con su alma mater. Él prefiere dejarlo de lado. “Se lo encargué a mis abogados”, explica. Una vez que llegó a Grecia “les dije que quería jugar futbol y ese tema lo dejaba a un lado”. Externa su esperanza en que “ojalá pudiera desaparecer” el Pacto de Caballeros.
Admite que “fue duro no participar 4 o 5 meses”. Hoy está volviendo al nivel que mostró hasta la primavera de 2014. “Estaba viendo una pronta salida del Olympiacos”, confiesa. Marcos Silva no lo tomaba en cuenta y él quería estar en la cancha.
Justo cuando la puerta para abandonar el club se hacía más grande empezó a jugar más. Las cosas cambiaron por completo. Minutos correspondidos con goles. Otra vez el protagonismo que quería. Resalta que “me tocó debutar en la UEFA Europa League”.
Lo pasa bien. Es feliz en Grecia. Entiende que si las cosas siguen así “a lo mejor salen más ofertas ahora que tengo más participación”. Por lo pronto se enfoca en responder a la confianza del entrenador, en terminar la temporada.
Sobre la Selección Mexicana confiesa que “no se ha acercado nadie”. Todo se reduce a los rumores y a las entrevistas que da Juan Carlos Osorio. Igual “confío en un llamado a la Selección” siempre que continúe con ese buen momento.
Finalmente habla sobre Marco Fabián. Le da gusto que haya llegado a Alemania. Comenta que “a veces hablamos y nos damos palabras de apoyo”. “Me da mucha alegría que más mexicanos estén brincando a Europa”, sentencia.