Por Hugo Eduardo Milian
Tercera ronda en la FA Cup. El nervio sabroso de la eliminación directa hace muy emocionantes estos partidos. Manchester City hizo los honores para recibir al Burnley. El primer lugar de la Premier ante el séptimo clasificado. Parecía muy disparejo en el previo, pero vaya que hubo emoción, justo lo que se espera en esta clásica competición inglesa.
PLANTEAMIENTO DE PARTIDO
Para el nivel que ostenta el Manchester City, ponerse con ellos al tú por tú es firmar la derrota. Sean Dyche, técnico del Burnley, presentó un esquema inteligente, muy inglés, de priorizar la defensa para salir al contragolpe. 4-4-2 como barricada ante el sistema de toque del Manchester City.
GROSERO ERROR DEL CENTRAL
Burnley buscó mediante pelotazos largos a sus dos delanteros. Ambos tanques iban al choque para incomodar la salida de los centrales ciudadanos. John Stones, cayó en la trampa. En una pelota que debió rechazar sin problemas, el central inglés se vio pichón, rebanó la pelota para dejarla como regalo de reyes a Ashley Barnes que adelantó al Burnley.
REGRESA LA CALMA
Los asistentes al Etihad Stadium ya estaban nerviosos al ver que su equipo no inquietaba al visitante que se mostraba muy ordenado. De tres toques el Burnley se plantaba con cierto peligro ante Claudio Bravo, mientras el City mucho tiki taka pero cero profundidad.
Tuvo que ser una viveza de Ilkay Gündogan la que destrabó el juego. Cobró rápido un tiro libre para habilitar al Kun Agüero que al minuto 56 empató el juego.
VOLTERETA LOCA
Apenas se sobaba del primer golpe Burnley cuando recibió el segundo trancazo. Un minuto y medio después del empate, el partido giró a favor del City. Toque desde el lindero del área de Agüero para Gündogan que sacó un taquito de mago para dejar solo al delantero. Doblete del Kun que le debe la cena al alemán.
SE CAYÓ EL SUEÑO del burnley
Ya con la desventaja en el marcador, el equipo visitante perdió la brújula. Los espacios se abrieron para los atacantes. David Silva filtró un balón para que Sané colocara el 3-1 que lapidó la esperanza de un empate. Leroy llegó a nueve goles en esta temporada, seis en Premier, dos en Copa de la liga, uno en Copa FA.
Entregado el Burnley, al minuto 82, Bernardo Silva se sumó al festín de goles. Demasiado castigo para un equipo que a su modo ofreció resistencia, pero el Manchester City anda en modo “no me toques ando chido”.
