1) Nunca volverás a esperar a que alguien te hago el paro para darle lo de tu pasaje y subirte al metrobús para llegar a la Fuente de Cibeles. Adiós Ciudad de México, hola Chipilo, Puebla, la pequeña italia de México. Así como lo oyen, juanáticos. En puebla existe una pequeña localidad fundada en 1882 por migrantes italianos, y que aún conserva un modo de vida con vínculos europeos. Olvídate de los pambazos polvorientos. Nunca más prietos en aprietos. Chipilo de mi amor: pueblo habitado por pieles blancas y cabellos negros, como los mismísimos colores de la Juventus.
2) Por fin portarás un jersey patrocinado por una marca de carros. ¿No es aquella una mejor mezcla que el campechano de cualquier taquería? Olvídate de ver el nombre de una aerolínea sobre tu pecho. ¿Aviones? Ya son suficientes los que te dan cuando te pones de intenso a hablar de Cristiano Ronaldo.
3) ¡Bienvenida la lasaña! Coviértete en el centro de atención hablando de los mejores lugares de lasaña en tu ciudad. Olvídate de sugerir la comida siempre, tu dominio del idioma italiano brillará como la frente aperlada de sudor de Dybala.
4) ¿Alguien dijo Juventus de Turín? Apóyate en esa famosa marca de chocolates que lleva el mismo nombre de aquella ciudad italiana para hacerte el novio del año con tu chica.
¿No son estas suficientes razones para alegrarse? Levanten el corazón, juanáticos.