Por Alonso Cerón
La llegada del Gullit Peña causa sentimientos encontrados entre los aficionados del Cruz Azul. Después del antecedente penoso en Chivas, muchos dudan que sea una de las soluciones para la sequía de títulos de liga de La Máquina en los últimos 20 años.
Para muestra un botón. Cuando estuvo en otro de los grandes, las Chivas, simplemente no dio el ancho, por lo que tuvo que regresar al León, donde su rendimiento tampoco fue el óptimo, incluso protagonizó un escándalo extra cancha, debido a sus excesos.
Después de su penoso regreso al Léon, el portugués Pedro Caixinha se lo llevó a la Liga Premier de Escocia en uno de los equipos más tradicionales, triunfadores y exigentes: el Rangers.
La estancia en Glasgow fue de pesadilla para el Gullit, aunque lo niegue. Desde el inicio, la prensa local advirtió a la directiva del equipo y a sus aficionados del comportamiento fuera del campo de juego de Peña, las fiestas, los antros y su afición a la diversión fácil.
Solamente seis meses después, el tamaulipeco salió de Escocia por la puerta de atrás, justo semanas posteriores al despido de Caixinha del Rangers por malos resultados. En su paso por la SPL (Scottish Premier League), Peña hizo 5 goles en 14 partidos.
Ahora llega al Cruz Azul, de la mano nuevamente de Caixinha, con la responsabilidad de echarse el equipo al hombro y demostrar que no es un cartucho quemado. Esperemos, por el bien de su equipo, y porque no, de la Selección Nacional que recupere el nivel que se le vio alguna vez.
Con este número, Carlos Peña defenderá los colores de la camiseta celeste.#AzulXTi?? pic.twitter.com/o2lMIHl0m4
— CRUZ AZUL FC ® (@Cruz_Azul_FC) January 9, 2018