Máxima seguridad en el Camp Nou previo al enfrentamiento entre el Barcelona y la Roma en la Champions League. La psicosis creada tras lo sucedido en París, ha dejado en segundo término el asunto deportivo, y se ha decidido triplicar la seguridad a los alrededores del inmueble ubicado en el distrito de Les Corts.
Agentes privados estarán vigilando la entrada y salida de los aficionados desde horas antes del encuentro. Jordi Jané, consejero del interior del gobierno autonómico, explicó que habrá más controles de seguridad de los normales, por lo que pidió cooperación y paciencia a todos los asistentes al encuentro. Asimismo, aclaró que las dependencias del equipo, como el Museo, estarán cerradas con el fin de poner en riesgo la seguridad de los seguidores.
Las puertas del Camp Nou serán abiertas al público tres horas antes del silbatazo inicial, así como los controles de seguridad, donde sólo se les permitirá pasar algunos objetos, que aún no han sido especificados por el consejero.
Todo está en manos de las fuerzas de seguridad, quien examinarán a detalle cada centímetro del estadio y el ingreso de los aficionados.