Ya estuvo bueno, juanáticos. Le tenemos que poner un alto a la violencia en nuestra sociedad y nuestro deporte favorito. Aquí les dejamos una guía para parar en seco el mal que crece cada día más: la violencia entre las aficiones.
No provocar
No pasa nada si cotorreamos con nuestros cuates y hacemos bromas o burlas inocentes. El problema empieza al provocar con palabras subidas de tono. ¿Para qué picar a alguien, sobre todo si tiene varias cheves encima? Nunca es buena idea.
No caer en provocaciones
Si tú ves que alguien quiere que muerdas el anzuelo, has todo en tu poder para ignorarlo. Cuando tengas ganas de responder, respira profundo por 10 segundos y aléjate lo más lejos que puedas del conflicto.
Denunciar
Si ves que en el estadio, bar o hasta en las redes sociales hay alguien violento, denúncialo en cuanto antes. Ve con la gente de seguridad, pon una denuncia en las redes sociales y asegúrate que esta persona no logré su objetivo.
Llevarla en paz
Invita una chela a tu cuate rival. Vayanse cada uno con la camiseta de su equipo. Enseñen al mundo que se puede convivir en paz. El ejemplo mueve montañas.
Recordar lo que nos une
Podremos vestirnos con diferentes colores, pero todos compartimos una misma pasión: el futbol. El día que entendamos eso, podremos compartir muchos momentos juntos y nos olvidaremos de una vez por todas de la violencia.