Después del triunfo de Tigres en Tijuana, el portero Federico Vilar tuvo un altercado con André Pierre Gignac que no pasó a mayores por la intervención de sus compañeros.
Mientras el delantero francés se dirigía al vestuario, Vilar pasó y le tomó el rostro. Gignac reaccionó y encaró al arquero retándolo a golpes. De inmediato, los jugadores y parte del cuerpo técnico de Tigres y Xolos intervinieron para separar a ambos jugadores.
Finalmente Gignac fue despedido de la cancha con varios vasos que le arrojaron los aficionados de Tijuana.