Tenía una fuerte misión por delante y no falló. El encargado de reemplazar a Messi en la Champions dominó el juego como si se tratara del argentino. No era para menos, es un viejo conocido y sudamericano, para que no se pierda el toque.
Rafinha cumplió como debía, se convirtió en ese jugador esencial para el Barcelona, los guió a la victoria y por si fuera poco abrió el marcador de una manera excelsa, cerró la pinza que ya lo esperaba al frente de la portería.

Jugó 72 minutos que le bastaron para dejar en claro que tiene lo necesario para competir en el equipo. Le cedió su lugar a Nelson Semedo, pero a la hora de salir fue ovacionado y aplaudido por todo el Camp Nou.
¡¡EL GOL DE RAFINHA ALCÁNTARA!! pic.twitter.com/fj9qdoOmX6
— Iniestismo 2 (@Iniestismo_FCB_) October 24, 2018