Por Alejandro Antonio
Una vez más Barcelona le ganó al Madrid en su casa, esta vez por 3 a 0. El partido fue muy parejo en el primer tiempo, pero en el segundo el Barça se motivó y sacó el resultado contra los blancos que se ahogaban en la angustia de no poder hacer nada.
A los madridistas puede haberles sorprendido el resultado, aunque en realidad era algo de esperarse. En primera porque el Barcelona ha hecho las cosas mucho mejor en el torneo que el Real Madrid, la abismal diferencia de 14 puntos lo demuestran.
Otra de las razones por las que a nadie le debe asombrar este resultado es porque en los últimos tres clásicos que se jugaron en el Bernabéu los culés anotaron tres goles en cada uno. Primero el doloroso 0-4 en la temporada 2015-16; el 2-3 de la 2016-17 y el último este 0-3. Único equipo en la historia de La Liga en lograrlo.
A los del Barcelona les encanta jugar en el Santiago Bernabéu, toda la presión se va a los merengues y es ahí donde empiezan a generar ocasiones, tener el balón y hacer que los blancos sientan desesperación al punto de perder la cabeza.
Justo ese punto de desesperación llega al medio tiempo, cuando el partido estaba cero a cero, escenario favorito del Barcelona en la casa merengue. De los últimos seis clásicos en Madrid que se fueron empatados a cero al descanso el Barça ganó tres y empató los otros tres, nunca tan apabullante como este sábado.
Al equipo blaugrana le sienta bien jugar en la casa del máximo rival. El Madrid debería proponer otro estadio para jugar como local, porque el Bernabéu es la casa del Barcelona.