Aún no se digiere con facilidad la noticia de la partida de Cristiano Ronaldo del Real Madrid (estamos con ustedes juanáticos madridistas), pero igual de difícil es entender que los dos monstruos del futbol mundial no se volverán a ver las caras en el Clásico español.
El Madrid no es Cristiano a nivel de competición, eso está claro. Es evidente que será una baja dura para los Merengues. Algunos impulsivos han de pensar que ya deberían de darle La Liga, Copa del Rey, Bota de Oro, Guante de Oro y todo lo que esté en oro a la Pulga, quien no tendrá un rival de nivel (o punto de comparación para los niños rata) de su talla.
Si recordamos la temporada pasada, Barcelona estuvo a nada de irse invicto y tuvo muy pocos inconvenientes para ganarla. Ahora, sin CR7, y también sin Zizou, habrá que ver si el Madrid es capaz de pelearle de tú a tú a los culés liderados por Lionel.