Thibaut Courtois hizo todo lo posible para salir del Chelsea y poder llegar al Real Madrid, su gran temporada en Inglaterra y espectacular mundial presagiaban un gran torneo con los merengues, pero su traspaso ha traído más tristezas que alegrías.
En Rusia apenas permitió seis goles en siete partidos o lo que es igual, un promedio de gol cada 105 minutos. Estadística muy alejada de su actualidad. En los últimos dos partidos, el belga se comió ocho goles (cinco en Suiza y tres contra Eibar) que lo deja con un gol cada 22.5 minutos.
Parece que como a Modric, ganar The Best y los reconocimientos del Mundial, les ha traído una malaria en la cancha. No levantan y podría traerles consecuencias muy graves en Madrid.