Por: Santiago Cordera
Hace unos días, Néstor de la Torre, presidente de Chivas, descolgó el teléfono rojo para llamar a su homólogo del Grupo Pachuca para saludarlo, desearle un buen año, y de paso para preguntarle por los precios de algunos jugadores que le interesan.
Jesús Martínez le agradeció sus buenos deseos, pero cuando De la Torre tocó el tema de “fichajes”, el presidente de Pachuca rechazó la propuesta de inmediato. “No vendemos en México, son políticas de la Institución y no se venden jugadores ni a Chivas ni a ningún equipo”, le respondió Martínez.
En Chivas no sentó bien la respuesta de Pachuca, principalmente porque la lista de jugadores que quería el conjunto de Guadalajara no era pequeña, sino todo lo contrario. Néstor quería dos jugadores de mucha calidad, como el Gullit Peña y el Gallito Vázquez. Preguntó también por Edwin Hernández, Jürgen Damm e Hirving Lozano.
Al recibir un no por respuesta, José Manuel de la Torre reiteró la importancia de nutrir sus fuerzas básicas. Desde su llegada ha insistido en la formación de talento joven para nutrir al primer equipo en su momento.