Por Jair Castillo
El equipo de mis amores y de varios millones de mexicanos abrió las puertas de su estadio para tomarse la foto oficial, tener un entrenamiento con su afición y convivir con la gente que los apoya, los sigue y los hace grandes. El América despertó al americanismo que se había dormido por años y las reacciones no se hicieron esperar.
Como ya estamos acostumbrados, los medios de comunicación atacaron esta dinámica del equipo, repito, ya estamos acostumbrados. Si el club gana es malo, si empata es pésimo, si pierde es el peor del país, si somos campeones fue fraude, si no lo somos es un fracaso, eso te da ser el más mediático del país, amado u odiado, pero nunca a medias tintas.
Los aficionados levantamos la voz en contra del periodista David Faitelson Pulido, ganador del Premio Nacional de Periodismo en 2017, llamó a los que se hicieron presentes en el Azteca, desempleados, acarreados y huevones, durante el programa Cronómetro de ESPN.
David, primero que nada quiero dejar claro que no tengo nada en contra de tu estilo de periodismo, sea como sea es digno de reconocer lo que has logrado, pero hoy, te equivocaste, lo hiciste de una manera muy grande y en nombre de todos los americanistas que pidieron permiso en el trabajo, que no les importó perder unos cuantos pesos, el tráfico, el calor, el cansancio con tal de apoyar a su equipo o darle una alegría a sus hijos al llevarlos para que pudieran ver a sus ídolos, te pido una disculpa pública, no te pido,¡te la exijo!
A cambio te ofrezco una que no sé si valga o te interese, la pongo frente a ti por todas las veces que el aficionado americanista te ha insultado, las tantas que te han recordado la agresión de nuestro último gran ídolo. Lo hago con el miedo de ser el que se lleve los insultos y seguramente muchas mentadas, pero ¿Sabes qué? Valdrá la pena si algunos de los papás, mamás, hijos, estudiantes, trabajadores, se sienten más tranquilos después de escucharte decir que lo sientes.
Por último, David Faitelson, que te quede claro, sé que lo sabes pero por si se te olvidó, eres una figura pública, una muy conocida y tienes que aguantar lo que la afición te diga, tal como los futbolistas te aguantan a ti. Por el contrario, los seguidores no tiene por qué soportar tus faltas de respeto y una vez más, TE EQUIVOCASTE.