Fabio Cannavaro estará 10 meses tras las rejas por intentar darse un chapuzón. El excapitán de la Selección de Italia, ha sido condenado por romper un cordón policial para entrar en su casa, misma que se encuentra en el marco de una investigación de las fuerzas de seguridad por una supuesta evasión de impuestos.
Fue en octubre del año pasado cuando Cannavaro empezó a ser investigado por un supuesto caso de evasión de impuestos. En el marco de dicha investigación, la policía italiana decidió sellar su casa en Nápoles para investigar a profundidad la propiedad.
De acuerdo con una investigación dirigida por el fiscal Luigi Cannavale, el futbolista, su esposa Daniela Arenoso y su hermano Paolo fueron a la villa para darse un chapuzón en la piscina olvidando que no podían hacer uso de la propiedad. El jugador ya ha iniciado un proceso de apelación para la sanción.