Contrario a Zlatan Ibrahimovic a Pierre-Emerick Aubameyang no le gusta jugar con la prensa. Al contrario, la aprovecha para coquetear, qué digo coquetear, ofrecerse al club al que desea ir.
Más clara ni el agua. Cachetada al Atlético de Madrid, que era su otro pretendiente y de paso al Barcelona que también le anduvo aventando flores.