Por Ivan Pérez
Cuauhtémoc Blanco está en la tarima principal y la voz se le quiebra por momentos, está ante 15,000 personas que lo miran desde abajo y en las azoteas, viste unos jeans y camisa blanca, también baila merengue. Una estampa del nuevo alcalde de Cuernavaca.
Uno de los últimos íconos del futbol mexicano está acostumbrado a que lo observen, hace una década era capaz de convocar a 100,000 fans en los estadios y ahora se alista a ganar –después del 60% de casillas computadas por el PREP- la alcaldía a Cuernavaca con el Partido Social Demócrata (PSD). Ha convencido a una ciudad con 23 propuestas divididas en 10 ejes y con la promesa que hizo pública en al menos un par de ocasiones: estará los tres años como presidente municipal del municipio más violento de todo México…
En febrero pasado el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y Justicia Penal AC señaló a Cuernavaca como el municipio más violento de nuestro país, superando a Acapulco o Chilpancingo, ambos de Guerrero. “El Índice de Violencia de Cuernavaca (Morelos) con 62.19 puntos es tres veces el calculado para todo el país (18.84)”, detalla el informe.
Durante su campaña -donde asistió a los sitios más marginales e inseguros de la ciudad- presentó cuatro propuestas concretas para “dar al pueblo tranquilidad”: Regresar los cuerpos policíacos a Cuernavaca, programa alerta vecinal, mejorar salarios a policías, programa de capacitación y dignificación a policías. ¿Así se deja de ser el más violento del país?
Si se mantiene la tendencia hasta el conteo final, Blanco ganará con 25.7% de los votos, superando el 21.1% de su contrincante más cercano (la coalición PRI-PVEM-Nueva Alianza). Aquí comienza “Temoland”… una ciudad que desea construir
La gente en las calles tiene una “teoría”, que el ex futbolista -aunque gane- no estará los tres años, que se irá a los seis meses y ocupará su sitio un político de formación. Pero Blanco ha prometido en actos públicos que no lo hará. “He dicho muchas veces de frente a los ciudadanos que yo voy a trabajar los tres años”… comentó unos días antes de terminar la campaña y casi un mes antes también declaró: “dejemos los rumores en el pasado, antes de iniciar campaña decían que yo dejaría el cargo y que solo era un personaje que venía a salvar un partido”.
Blanco, quien antes de iniciar su campaña señaló que fue objeto de amenazas de muerte, encara un reto que él define como un camino “que Dios me puso” y para ello ha montado “una guerra contra los políticos”. Un análisis de sus discursos y declaraciones de campaña detalla que sus frases más recurridas fueron: “yo vengo de una cuna pobre como ustedes”, “yo también fui comerciante y sé el esfuerzo que representa”.
Cuau es el candidato de un partido (PSD) que no era la mayoría, que es entre las 11 fuerzas políticas que recibe presupuesto en la ciudad la número siete (4.4 millones de pesos este año) y que el pasado 25 de mayo sorprendió que la encuestadora Parametría le diera el triunfo con un 36% de las preferencias.
Blanco no fue tomado en serio desde un principio por casi nadie, mucho menos por sus contrincantes. El 13 de abril pasado los empresarios de Morelos no lo invitaron a debatir con otros candidatos ya que no lo consideraban una “propuesta seria” y aunque posteriormente decidieron dar marcha atrás, el exjugador decidió no ir.
Pero el triunfo de Blanco se da en un clima donde no más del 15% del 100% de la lista nominal de Cuernavaca (quienes pueden emitir un voto) fue el que lo eligió como su alcalde, ya que apenas hubo 50.2% de participación del total. Es decir que menos del 8% de las 350,000 personas que habitan la capital morelense decidieron el destino de la localidad.
Temo participó en una carrera, bailó merengue en sus mítines, posó haciendo la “Temo señal”, iba a los puestos de los mercados públicos para darle la mano a los comerciantes, las señoras lo abrazaban, hablaba de su paso como futbolista para argumentar que podía ser capaz de cambiar el destino de una ciudad que es de las más conflictivas de nuestro país. Son 23 propuestas para gobernar y la promesa de estar tres años en el cargo. Blanco jamás ha prometido tanto, ¿cumplirá?
Estas son las promesas de campaña de Cuauhtémoc:
Seguridad. Regresar los cuerpos policíacos a Cuernavaca, programa alerta vecinal, mejorar salarios a policías, programa de capacitación y dignificación a nuestros policías.
Transparencia y cero corrupción. Manejo adecuado de los recursos públicos, gobierno austero ya que todos los proveedores del municipio serán locales.
Agua. Abastecimiento 100% de todas las colonias, programa emergente “agua cerca de ti”, las “Temoc pipas”, programa de infraestructura en la red hidráulica.
Empleo y transporte público. Generación de empleo año con año, transporte gratuito para estudiantes y tercera edad.
Baches. Programa “adiós a los baches”.
Alumbrado público. Programa “ilumínate Cuernavaca”.
Educación. Se dotarán uniformes y zapatos para los niños de educación primaria, programa “tu único trabajo es estudiar” es una beca respecto al promedio de los estudiantes.
Recuperación de espacios públicos.
Turismo. Inversión para la capital, recuperación de la ruta gastronómica, recuperación del centro histórico, construcción del Parque Acuático Cuernavaca.
Deporte. Cruzada por el deporte para ser el centro deportivo nacional, inversión en centros deportivos públicos, construcción canchas de futbol rápido