Por Aarón Alvarado
Este martes llegaron los dos bombazos del Ame, Jérémy Ménez y Andrés Ibargüen. Lo que parecía que había sido un recibimiento caluroso y reconfortante de buena voluntad de los americanistas, resultó ser una cosa un poquitín mas decepcionante.
Según gente de ESPN, el América ocupó la de las elecciones en México, llevar acarreados a sus eventos. Los barristas del América fueron avisados del arribo de los dos refuerzos y solo esperaban las órdenes de la directiva para salir al aeropuerto a recibir a sus dos nuevas estrellas.
Parece que la intención de los directivos era hacer sentir a los nuevos jugadores “como en casa”, pero no contaban con la astucia de su distinguida barra.
Después del recibimiento, el buen Andrés Ibargüen, se percató de que faltaba su teléfono celular y resultó que uno de los honorables aficionados había sido el culpable de su secuestro (luego no quieren que los critiquen).
Aún con todo se tienen bastantes expectativas para el debut de estos dos jugadores y de lo que puedan aportar al club.
