Emilio Lara emprende un nuevo capítulo en su carrera futbolística al ser cedido a préstamo por el América al Necaxa. La decisión, tomada de mutuo acuerdo entre ambos clubes, busca que el defensor recupere su mejor nivel y regrese fortalecido a Coapa.
Lara, quien desde su debut fue considerado una de las grandes promesas del futbol mexicano, ha experimentado un descenso en su rendimiento en las últimas temporadas. Su ausencia en los planes de André Jardine, aunado a la competencia por un puesto en la defensa, lo llevó a buscar nuevos horizontes.
La intención es que recupere su nivel en Necaxa y, en un futuro cercano, regrese a Coapa. Esta fórmula funcionó en el caso de Ramón Juárez, quien, tras un préstamo al Atlético de San Luis, volvió al América y se consolidó como titular.
Emilio Lara, una baja sensible para el América
La salida de Lara representa una sensible baja para el América, que ya sufre las lesiones de Igor Lichnovsky y Kevin Álvarez. El joven defensor, quien puede desempeñarse tanto como lateral derecho como central, era una pieza clave en la zaga azulcrema.
Bajo la dirección de Tano Ortiz se consolidó como titular indiscutible en la defensa, desplazando incluso a Miguel Layún. Su buen desempeño le valió ser convocado como sparring para el último Mundial por Gerardo Martino.
Un cambio de aires para relanzar la carrera
El Necaxa, por su parte, se refuerza con un jugador de gran proyección. Los Rayos buscan recuperar la estabilidad en la defensa y confían en que Lara pueda aportar su talento y experiencia.
La estrategia de los préstamos: una fórmula probada
La decisión del América de ceder a préstamo a sus jóvenes promesas es una estrategia que ha dado resultados en el pasado. Al permitir que los jugadores adquieran experiencia en otros equipos, el Club América busca fortalecer su plantel y recuperar a sus talentos cuando estén maduros.