Ronaldinho es, sin lugar a dudas, uno de los jugadores más importantes que han tenido paso por la Liga MX. Su ciclo en Querétaro quedará marcado por siempre en la historia de los Gallos Blancos, tanto por el talento que mostró con el plantel como por las curiosas anécdotas que dejó afuera de la cancha.
A pesar de haber tenido su ciclo en Querétaro sobre el final de su carrera, Ronaldinho le dejó algo de su magia a los fanáticos del equipo mexicano. Sin embargo, más allá de eso, es conocido que el brasileño mantuvo un estilo de vida extravagante a lo largo de toda su carrera. Su estadía en México no fue la excepción.
Para el momento de su fichaje, se sabía que el estilo de vida fiestero del futbolista era algo con lo que tenían que lidiar los Gallos Blancos. Se conocen algunas de las locuras que protagonizó el exjugador de PSG, FC Barcelona y AC Milan en suelo mexicano.
Increíbles anécdotas de Ronaldinho en Querétaro
En primer lugar, para aceptar la propuesta de Querétaro, Ronaldinho exigió una casa con un gran número de habitaciones, ya que el crack brasileño vive rodeado de sus familiares y sus amigos. El campeón del mundo también trajo a México a su chef personal, siendo la persona encargada de cocinar todas sus comidas.
Entre las exigencias sobre su casa, pidió que la propiedad tuviera un amplio jardín, lugar al que llevó 3 camiones de arena para armar una cancha de voley fut. El entonces director deportivo del club, Joaquín Beltrán asistía frecuentemente a la casa del jugador de manera frecuente, asegurando que los partidos de voley fut eran un verdadero espectáculo.
Quizá la máxima locura de Ronaldinho durante su paso por México fue cuando quiso ir a una plaza a comprar una playera. Sin embargo, la presencia de la gran estrella generó un revuelo enorme en el lugar. Por ende, el jugador logró que abrieran una plaza una hora antes solo para hacer sus compras.
