La Selección de Uruguay le ROBA el triunfo a la campeona del mundo, Argentina en La Bombonera.

La escuadra charrúa se llevó una nueva edición del ‘Clásico del Río de la Plata’ diez años después.

Y fue nada más y nada menos que con la actual campeona del Mundo, la Argentina de Lionel Messi.

No fue un resultado más, pues lograron remontar el marcador adverso de la última ocasión en la que se midieron.

Triunfo histórico

Cabe mencionar que la última victoria charrúa en suelo argentino, fue nada menos que en la Copa América de 1987. 

Lo hizo gracias a un gol de Araujo que les terminó dando una complicada victoria en un partido marcado por la intensidad.

La escuadra Albiceleste nunca se sintió cómodo en el terreno de juego, incluso Lionel Messi se vio superado y de esta manera sufrieron su primera derrota desde aquella de Arabia en el Mundial.

Mucha intensidad, golpes y entradas duras estuvieron a la hora del día con tal de poder mantener el mayor tiempo posible el balón y no más de dos segundos.

El único capaz de esconder el esférico era un Messi que demostró estar muy enchufado pero que no pudo superar esa presión uruguaya.

Argentina no pudo en casa

Messi no era capaz de recibir un balón y la única ocasión que tuvo fue una falta marca de la casa que mando con un riflazo al arco rival, pero que lamentablemente tocó el travesaño.

El cual se fue por encima de la portería de Rochet y la escuadra sudamericana empezó a dejar muchos espacios atrás.

Situación que aprovechó Uruguay para salir a la contra con un pase de Nico de la Cruz que dejó solo a Darwin para definir ante el Dibu y hacer el definitivo 2-0.

Derrota dura para Argentina que tiene por delante un encuentro ante Brasil en apenas tres días y tres puntos para Uruguay.

Que da un golpe encima de la mesa tras ganar precisamente a la albiceleste y brasileños, dando muestras claras del efecto Bielsa.

Tensión al interior de la Albiceleste

Luego de este histórico fracaso ante la escuadra charrúa, al interior del equipo comandado por Scaloni la tensión se convirtió en algo palpable.

Pues durante el encuentro algunos de los jugadores argentinos se comenzaron a molestar entre ellos incluso llegando a los conatos de bronca dentro del terreno de juego.

Al respecto, el astro sudamericano, Lionel Messi se negó a hablar del tema por respeto a sus compañeros.

Aunque si comentó que las discusiones al interior del equipo se deben a la inmadurez de algunos de los jugadores y que les faltaba aprender sobre jerarquías.

“Prefiero no decir lo que pienso sobre algunos gestos. Pero estos jóvenes tienen que aprender a respetar de sus mayores”.

“Este partido siempre fue intenso y duro pero siempre con mucho respeto. Tienen que aprender un poquito”, declaro el jugador del Inter de Miami en la MLS.