Cristóbal Campos, arquero de la Selección de Chile, sufrió un grave accidente de tráfico y uno de sus pies debió ser amputado.
Según informaron las fuentes médicas, el incidente se produjo en una de las principales autopistas de Santiago de Chile a las dos de la mañana. Además, la policía está bajo investigación de lo sucedido.
Cristóbal Campos y una grave tragedia
El portero, a poco más de un año de su debut en la Selección de Chile, protagonizó un accidente de tráfico que condiciona su carrera profesional tras conocerse que uno de sus pies tuvo que ser amputado.
El ex portero de la Universidad de Chile estrelló su camioneta pick-up de alta gama en la madrugada del domingo cuando conducía por la ruta 78 a la altura de la localidad de Malloco, 20 kilómetros al sur de la capital.
Según revelaron los testigos perdió el control mientras la policía investiga que fue lo que realmente sucedió en una de las principales autopistas de Santiago de Chile.
Todo apunta a que la colisión deriva de un exceso de velocidad y un fuerte impacto contra uno de los muros que dividen los carriles. El joven de 25 años fue trasladado a un centro médico de urgencia. Si bien se encuentra fuera de peligro, debieron amputarle parte de la extremidad inferior derecha a la altura del tobillo.
La Selección de Chile pierde a uno de sus porteros
Cristóbal Campos se formó en las divisiones inferiores de Colo-Colo luego tuvo un paso por Universidad de Chile. En la ‘U’ debutó ante Internacional de Porto Alegre por la clasificación a la Copa Libertadores 2020. El portero rescindió su contrato al ser investigado por violencia de género.
Actualmente defendía los colores de San Antonio Unido de la segunda división del fútbol chileno. Además, formó parte de las divisiones menores de la Selección chilena. En 2023, debutó con la Mayor en un amistoso que ganaron 3-0 ante Cuba.
Un grupo de expertos en traumatología y especialistas en pie trabajaron durante varias horas y lograron reconstruir la extremidad. Sin embargo, aseguraron que no garantizan que pueda volver a jugar.
