El Real Madrid dio un golpe de autoridad en la Liga al vapulear 4-1 a un endeble Villarreal en el Santiago Bernabéu. Los merengues aprovecharon a la perfección los traspiés de Atlético y Barcelona para escalar a lo más alto de la tabla, aunque con un partido más que los colchoneros.
Jude Bellingham, el jugador más en forma del campeonato, abrió la cuenta a los 13 minutos tras una sublime asistencia de Luka Modric. El croata se resarció de su penal errado ante el Sevilla con una actuación magistral en la creación. Poco después amplió la ventaja Rodrygo Goes, siempre letal cada vez que pisa área contraria.
El Villarreal reaccionó tímidamente ya en la segunda mitad con el tanto de Morales, pero Brahim Díaz le dio la estocada final a los visitantes con una auténtica obra de arte: amagó hacia ambos lados a la zaga amarilla antes de definir cruzado ante la estirada desesperada de Jorgensen.
Acto seguido, Modric redondeó la goleada con un derechazo combado desde el borde del área.
Real Madrid se afianza como líder provisional
De esta forma, el Madrid se afianza como líder provisional, sacando 7 puntos de ventaja sobre el Barcelona y 8 respecto al Atlético, que aún debe un encuentro. Los de Ancelotti siguen engranando victorias pese a la plaga de lesiones que azota al equipo, con la zaga titular completa en la enfermería. A base de gol y fútbol champagne, el Santiago Bernabéu ya sueña con la 15a Liga de su historia.
