El Brentford le tenía una buena sorpresita al Liverpool y le metió un 3-1 tremendo. El Liverpool se acercó en el marcador, pero no le alcanzó y se estanca en su lucha por puestos de Champions. ¡La Premier League es una locura!
Todos esperaban que el Liverpool arrancara el partido con todo para buscar cerrar la victoria, pero se encontró con un tremendo Brentford. Las abejas salieron de una manera tremenda demostrando porque ha sido el mata gigantes de esta temporada de la Premier League.
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Poco a poco el partido se emparejó, pero el Brentford seguía teniendo las mejores chances de gol. y después de llegar y llegar, los dioses del futbol les dieron su premio. En un tiro de esquina a favor del Brentford, Konaté terminó desviando la pelota y metiéndola en su propia portería. ¡Lo ganaba el Brentford!
A partir del gol, las abejas se soltaron y comenzaron a llegar todavía más claro. Incluso les anularon dos goles por fuera de lugar. Pero la justicia llegaría y de la mano de Wissa, el Brentford ponía el marcador 2-0. ¡El Liverpool no metía ni las manos!
El gol de Wissa dejó a los Red muy tocados, pero afortunadamente para ellos el medio tiempo llegó para replantear sus ideas. A pesar de que el Liverpool tuvo más la pelota, nunca lograron armar buenas jugadas de gol; Klopp tenía trabajo que hacer en el vestuario.
Ningún marcador es seguro en la Premier League
En la segunda mitad, la historia cambió completamente. Seguramente mi compi Jürgen Klopp les metió una regañada sabrosa en el vestuario y los cracks del Liverpool salieron listos para remontar. Y vaya que funcionó la regañiza porque cinco minutos después, Alex Oxlade-Chamberlain clavó el primero para el Liverpool. ¡Ya se acercaban los pupilos de Jürgen Klopp!
Ya con el gol, los cracks del Liverpool se fueron como gordita en tobogán por el empate y metieron en su propia área al Brentford. Tanto así que parecía que tenían una línea de seis defensas esperando todos los ataques de los Reds.
La cosa ya era muy difícil, Salah, Darwin Núñez y compañía les estaban apedreando el rancho de una manera tremenda, pero seguían aguantando como todos unos guerreros. Pero no sería todo, que, en un tremendo contragolpe, el Brentford encontró el 3-1 definitivo del partido.