Lionel Messi, el astro argentino que ha dejado huella en cada cancha que ha pisado, ha llevado su talento a la Major League Soccer, específicamente al Inter Miami. Su impacto ha sido inmediato y contundente. No solo ha llenado estadios, sino que también ha sido clave para que el Inter Miami llegue a disputar una final.


Antoine Griezmann, ex compañero de Messi en el Barcelona, habló con ESPN y no dudó: “Messi es el mejor de la historia, llena todos los estadios y hace muchos goles. Clasificó al Inter Miami para jugar una final, todo increíble. Creo que lo mejor que pudo haber hecho la MLS es llevar a Messi para jugar en Estados Unidos”.

El impacto de Lionel Messi en la MLS

Pero Messi no solo ha influenciado en el terreno de juego. Su llegada ha tenido un efecto dominó en la publicidad y la imagen de la MLS a nivel mundial. Griezmann lo reconoce y afirma que la incorporación del astro rosarino ha sido “muy buena para la publicidad y la imagen de la MLS en general“.

Desde México, se puede percibir cómo la liga estadounidense ha ganado notoriedad y se ha convertido en un punto de referencia para aficionados y expertos del balompié.

¿Griezmann a la MLS?

Antoine Griezmann, quien ha brillado en clubes españoles como la Real Sociedad, Atlético de Madrid y Barcelona, tiene en mente un sueño: jugar en la MLS. Aunque nunca ha jugado en el fútbol francés, el delantero galo tiene claro que desea pisar canchas estadounidenses y hacerlo en su mejor nivel.

Mi objetivo es jugar alguna vez en los Estados Unidos, me gustaría hacerlo siendo competitivo“, expresó el francés. Esta declaración resalta la creciente atracción que la MLS ejerce sobre grandes figuras del fútbol europeo.

La MLS: ¿un nuevo objetivo para todos?

Desde México, observamos con interés cómo la Major League Soccer se está posicionando como una liga competitiva y atractiva para grandes talentos. La llegada de Messi ha sido un catalizador, pero el interés de jugadores como Griezmann sugiere que la MLS está en camino de convertirse en un destino top para futbolistas de élite.

Sin duda, el fútbol estadounidense está viviendo un renacimiento, y desde el sur de la frontera, esperamos con ansias ver qué otras sorpresas nos depara el futuro.